Estamos descubriendo mejores formas de estancar el progreso y la innovación bloqueándonos a nosotros mismos y a los demás. A través de esto, hemos llegado a valorar:
Complejidad sobre buscar la simplicidad.
Priorizar el engaño y el ocultamiento sobre la transparencia y la honestidad.
Valorar la jerarquía y la antigüedad sobre la innovación y la experiencia.
Adherirse a planes rígidos sobre adaptarse al cambio.
Es decir, ¡solo valoramos los elementos de la izquierda!
Principios detrás del Manifiesto FrÁgil:
Nuestra máxima prioridad es satisfacer a la dirección y a las partes interesadas, incluso cuando están equivocadas y desconectadas de los comentarios de los empleados, las necesidades de los usuarios/finales y las condiciones del mercado.
Aceptamos cambios ya que todo es “Prioridad 0” o “Prioridad -1”, incluso tarde en nuestro ciclo de desarrollo. ¡Entregamos para hacer feliz a la dirección!
Estancamos la entrega/progreso. Cuanto más tiempo tome, más cambios podemos incluir. No importa si los requisitos no se entienden; entregamos productos a medio hacer.
Los empresarios desprecian a los equipos de tecnología hasta el punto de que es mejor externalizarlos que tenerlos internalizados.
Construimos proyectos alrededor del concepto del Club de los Mentirosos. No confiamos en nadie para hacer el trabajo; pagamos mano de obra barata para que se haga.
Nos escondemos detrás de procesos complejos y, como parte de nuestra práctica del Club de los Mentirosos, ocultamos información y esperamos a que alguien más cometa errores. Evitamos las conversaciones cara a cara o usamos nuestro rango para subyugar a otros.
Nuestra medida de progreso se basa en quién beneficia nuestras agendas ocultas, y disminuimos nuestra falta de progreso exponiendo a otros.
Mantenemos separados a los equipos, patrocinadores, desarrolladores y usuarios. La información debe proporcionarse solo cuando sea necesario.
No valoramos la excelencia técnica ya que la vemos como un gasto; por lo tanto, externalizamos esto para poder culpar a otros.
La complejidad es esencial ya que es una forma de justificar lo especiales que somos.
Compramos requisitos y diseños, luego los forzamos en nuestros equipos incluso cuando estos no se ajustan a los productos y equipos.
Siempre buscamos evitar la propiedad y los compromisos; pedimos ser empoderados para estancarnos aún más y evitar la responsabilidad.